¿Se puede reducir el dolor en las articulaciones durante el clima frío?

¿Notas un aumento del dolor articular con la bajada de las temperaturas? El frío puede recrudecer una vieja lesión en personas de diversas edades. Pero existen maneras de encontrar alivio a pesar de la bajada de las temperaturas. Aunque ninguna garantiza que no sientas dolor, ¡sin duda vale la pena probarla! Los siguientes consejos pueden ayudarte a reducir el riesgo de dolor e incluso podrían hacer que disfrutes aún más del invierno (¡si aún no lo haces!).

1. Mantente caliente

A medida que baja el mercurio, tome medidas para mantenerse abrigado tanto dentro como fuera de casa. Tenga mantas listas en la sala para estar abrigado mientras se acurruca para ver sus películas o series favoritas. En el exterior, asegúrese de llevar guantes en las manos, incluso si la temperatura no parece demasiado fría. Elija guantes o mitones impermeables si existe la posibilidad de que se le mojen las manos. También abrigue bien las piernas y las rodillas con leggings, medias y otras capas.

2. Las capas son tus amigas

Vestirse con varias capas permite adaptarse más fácilmente a los cambios de temperatura a lo largo del día, lo que puede ayudar a prevenir el dolor articular en climas fríos. Por ejemplo, al usar varios pares de guantes finos sobre las manos, se puede controlar el nivel de calor que necesitan según el frío que haga afuera.

3. Sigue haciendo ejercicio

Los deportistas entusiastas al aire libre suelen estar listos para salir sin importar la temperatura. Pero con un poco de creatividad, puedes diseñar un plan de ejercicios en interiores que también te ayudará a mantenerte activo (y a reducir la posibilidad de recaídas por lesiones pasadas u otros problemas). Invierte en una cinta de correr, prueba una clase de yoga en el departamento de parques y recreación de tu localidad o, si tienes acceso a una piscina climatizada cerca, visita siempre a tu médico antes de comenzar cualquier programa de ejercicios.

4. Obtenga su vitamina D

Según una investigación publicada en la edición de septiembre de 2015 de Pain Management, los niveles bajos de vitamina D no solo pueden aumentar la sensibilidad a la artritis, sino que también pueden aumentar el riesgo de osteoporosis. Durante los meses de invierno, es aún menos probable obtener la vitamina D necesaria de la luz solar, su fuente natural. Consulte con su médico para determinar si necesita suplementos para mantener sus niveles de vitamina D dentro de los límites adecuados.

5. Evalúe su peso

Pida una cita con su médico para que le mida con precisión su altura y peso y así pueda calcular su índice de masa corporal. Según la Revista de la Asociación Médica Estadounidense (JAMA), bajar de peso proporciona mejoras significativas a las personas con artritis de rodilla. Si tiene sobrepeso, comprométase a bajar de peso de forma gradual y saludable.

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